Por Jorge L. Trujillo
La Inhabilidad del Hombre: Una Doctrina Universal
Hay varias doctrinas tan importantes para la iglesia y sin creer en las mismas no se puede ser considerado parte del cristianismo bíblico, ortodoxo e histórico. Tenemos doctrinas como la Trinidad, la deidad eterna de Cristo, la veracidad sobre la crucifixión, muerte y resurrección de Jesús, etc. Aparte de esas doctrinas existe una doctrina que todos los cristianos han afirmado y reafirmado a lo largo de la historia. ¿a que me refiero? Estoy hablando de la doctrina de la incapacidad humana para responder al llamado del evangelio o para hacer algo espiritualmente positivo. La historia de la iglesia es testigo de la consistencia universal sobre esta doctrina.
Hay varias personas que piensan que esta doctrina es solo algo errado del ‘Calvinismo’, pero lo cierto es que todas las denominaciones cristianas ortodoxas de hoy, así como los cristianos del pasado, han sostenido, correctamente, que sin la obra de gracia (no merecida) por medio del Espíritu Santo interviniendo en el corazón de la persona, no podrá haber una capacidad para responder con fe al evangelio.
No son solamente los Presbiterianos o los Reformados (Calvinistas) quienes sostienen esto. Los Reformadores y sus seguidores ya sean Arminianos, Wesleyanos o Pentecostales, y antes de los Calvinistas ya los Luteranos, la Iglesia Católica en el II Concilio de Orange, San Agustín, los Padres ante nicenos, y los padres apostólicos hacen eco a los apóstoles y al mismo Jesucristo en este punto. No hay salvación posible si Dios no interviene por medio de su Espíritu Santo.
Lutero escribió su famoso tratado titulado "La esclavitud de la voluntad". El predicador Arminiano del siglo XVII, John Wesley, predicó esto:
"¿Está el hombre por naturaleza lleno de todo tipo de maldad? ¿Está vacío de todo bien? ¿Está completamente caído? ¿Está su alma totalmente corrompida? O, para volver al texto, ¿es ‘todo designio de los pensamientos del corazón de ellos de continuo solamente el mal?’ Admítelo, y hasta ahora eres un cristiano. Niégalo, y no serás más que un pagano todavía". (Sermón "El pecado original")
Por su parte la iglesia Católica Romana, aunque trata de distinguirse y distanciarse de los evangélicos, también afirman la necesidad de la gracia divina (obrada por el Espíritu Santo) para que el hombre pueda creer. El Catecismo de la Iglesia Católica define la gracia así:
“La gracia es el favor, la ayuda gratuita e inmerecida que Dios nos da para responder a su llamado a convertirnos en hijos de Dios, hijos adoptivos, partícipes de la naturaleza divina y de la vida eterna. La gracia es una participación en la vida de Dios”. (CCC n.º 1996-1997)
Así que, como vemos, ‘la inhabilidad humana’ es una creencia universal en el cristianismo. Todos los cristianos entienden que es la obra del Espíritu Santo en el corazón del hombre la que hace posible su salvación. Y eso es así porque Jesucristo mismo lo dejó claro en sus enseñanzas cuando dijo “ninguno puede venir a mí si el padre no le trae” (Juan 6:44) y también “el Espíritu es el que convence de pecado, de justicia, y de juicio”.
¿Cómo opera el Espíritu Santo?
Como vemos, todos están de acuerdo que el hombre natural está ciego y sordo a las cosas espirituales la manera en que el Espíritu obra es ‘iluminando’ la mente y trayendo ‘convicción’ para que la persona al ser redargüido por su pecado sea movida al arrepentimiento. Todos los creen que la operación del Espíritu Santo es imprescindible para la conversión, sin embargo, no todos están de acuerdo en ‘cómo’ y ‘cuánta’ debe ser la obra del Espíritu Santo para lograr su cometido. En lo que sí están todos de acuerdo es que el medio principal para la obra del Espíritu en pecador es “la predicación del evangelio” el cual es “poder de Dios para salvación” (Rom. 1:16).
Arminianos y Wesleyanos
Los Armianianos y Wesleyanos lo llaman “gracia preveniente”. Una gracia especial otorgada por Dios para que las personas puedan creer antes de nacer de nuevo. Para los Arminianos es como un ‘despertar espiritual’ que compunge el corazón y permite al individuo ‘comprender’ el evangelio para poder creerlo. Sin embargo, ese despertar no garantiza que haya una respuesta positiva. Los Wesleyanos creen que después de la caída Dios extiende su gracia preveniente a todos los hombres para superar los efectos de la caída de Adán y de esa manera ponerlos en posición de poder recibir y comprender el evangelio.
Evangélicos y Pentecostales
Muchos evangélicos no calvinistas, como el recientemente fallecido pastor bautista Dr. Charles Stanley, también creen que la operación del Espíritu Santo no está siempre presente. Una persona puede tener una ventana de oportunidad para ser salva y si no la aprovecha, es posible que ya nunca mas la pueda volver a tener. Los pentecostales creen algo similar, pero muchos de ellos también sostienen el concepto de que hay “almas de salvación” por lo cual Dios seguirá tratando con esa persona hasta que al fin ella decida recibir la oferta de la salvación.
Católico Romanos y Ortodoxos Orientales y Griegos
Los católicos romanos también creen en la gracia preveniente con la predicación del evangelio como los evangélicos mencionados arriba. Sin embargo, para ellos también hay otros medios que Dios usa para traer la ‘regeneración’ en las personas y que luego resultarían en la fe. Junto con los Luteranos, los Católicos Romanos creen en la regeneración bautismal. Al ser bautizada, la persona es regenerada, por lo que para ellos la ‘fe inicial’ como tal es producto de la fe preveniente, pero es el agua del bautismo la que ‘regenera’ el alma.
Los Reformados y Presbiterianos
Los Reformados tal como los demás, afirman que sin la intervención del Espíritu Santo el hombre no puede creer al llamado del evangelio. Pero el punto de vista Reformado es distinto. Para ellos esa gracia preveniente que causa el ‘despertar’ es en efecto ‘el nuevo nacimiento’ o ‘regeneración’ por lo cual siempre termina en producir el efecto deseado por Dios. Lo cual no puede decirse de los demás grupos.
Conclusión
Como vemos, la doctrina de la inhabilidad humana es una enseñanza universal en todos los grupos cristianos. Aunque la manera en como Dios opera por medio de su Espíritu para traer a las personas al punto de comprensión, el arrepentimiento, y la fe, son variadas entre los cristianos, todos están de acuerdo en que Dios tiene que hacer algo, tiene que intervenir directamente para que el hombre pueda ser salvo.
Se le llama por varios nombres y se le adjudica distinta extensión de influencia en el hombre pecador:
● Gracia Preveniente
● Llamado eficaz
● Toque del Señor al corazón
● Iluminación del entendimiento (los sentidos)
● Apertura de los ojos
● Gracia capacitadora o don de la fe
● Gracia Salvadora o Irresistible
Pero, lo cierto es que sin esa iniciativa divina de gracia salvadora no puede haber éxito en salvación ningún hombre.
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Escrito y Añadido: 24 de abril, 2023.