Doctrina de Ministerios Vida Eterna
La Biblia: Creemos que todos los 66 libros de la Biblia tal como fueron originalmente dados son completamente la Palabra de Dios, y por lo tal es la única y final regla de fe y suprema autoridad para la vida. (2 Timoteo 3:16; 2 Pedro 1:20-21).
Dios: Creemos que hay un solo Dios, creador del hombre y de todas las cosas visibles e invisibles. Él es quien gobierna el cielo y la tierra. Dios se ha manifestado a la humanidad como el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, quienes son tres personas iguales en perfección divina y co-eternas, que trabajan unidas en todo propósito, por lo cual le llamamos la Divina Tri-unidad (Trinidad).
Cristo: Creemos que Cristo es el eterno Hijo de Dios (Hebreos: 1, 2-3); quien es el creador y sustentador de todas las cosas que existen. El es la manifestación misma del Dios invisible (Filipenses 2:6; Colosenses 1:15-17), que fue concebido por el Espíritu Santo y nacido de una virgen, tomando así forma de hombre (Juan 1:2-3, 14). Creemos que Cristo fue muerto crucificado en una cruz, enterrado en una tumba y que resucitó de entre los muertos al tercer día conforme a La Escritura. Creemos que Cristo fue levantado hacia el cielo y está sentado a la diestra del Padre y es el único mediador entre Dios y los hombres (I Timoteo 2:5) y en cuyo solo nombre hay salvación (Hechos 2:38). Creemos que Cristo volverá por segunda vez a salvar eternamente a los que han creído en El, estén vivos o muertos. (I Corintios 15: 20-23; Tito 2:11-14)
El Espíritu Santo: Creemos que el Espíritu Santo es una persona, no una influencia; y que es eterno junto con el Padre y con el Hijo (Hechos 5:3-4). Creemos que el Espíritu Santo forma parte de la obra redentora de Dios convenciendo al hombre de pecado, regenerando y santificando al los creyentes.
El Hombre: Creemos que la raza humana, por la desobediencia de Adán está en pecado por naturaleza y selección, y que a no ser por la obra redentora de Cristo permaneceríamos en enemistad con Dios (Romanos 8:7), y bajo el gobierno de Satanás y caminando en nuestra propia voluntad pecaminosa. (Efesios 2:1-3)
La Salvación: Creemos que Dios en su infinita misericordia y gracia a provisto la salvación al hombre por medio de la obra redentora de Jesucristo, quien llevó nuestros pecados en su cuerpo en la cruz (I Pedro 2:24). La salvación se recibe únicamente por la fe en Cristo Jesús, sin importar nuestros esfuerzos, meritos, u obras de justicia. La salvación es completada por la labor convencedora y regeneradora del Espíritu Santo quien produce en nosotros la fe y el arrepentimiento de nuestros pecados, lo cual se hace manifiesto en una vida caracterizada por la obediencia a la voluntad de Dios tal como lo establece la Biblia (Mateo 7:21-23; Efesios 2:10)
La Iglesia: Creemos que los que han puesto una fe verdadera en Cristo han sido bautizados por el Espíritu Santo en su cuerpo, el cual es la iglesia y del cual El, Cristo, es la cabeza. La iglesia está compuesta por todos aquellos que han nacido de nuevo en Cristo. Los miembros de este cuerpo son dotados de dones por medio de Dios para el propio funcionamiento de la iglesia y se reúnen en congregaciones locales con el propósito de edificarse mutuamente en Cristo, y evangelizar al mundo. (I Corintios 12:12-13)
Cristiano: Un cristiano es alguien que ha nacido de nuevo (nacido del Espíritu Santo) y que es un hijo de Dios. Es miembro de la familia de Dios (Efesios 2:19). Es miembro del cuerpo de Cristo, la Iglesia, dentro de la cual ha sido bautizado por el Espíritu Santo (I Corintios 12:13). Es además miembro activo de una congregación local donde funciona junto con otros cristianos para el fortalecimiento y la edificación del cuerpo de Cristo (Hebreos 10:25; Efesios 4:11-16) El cristiano esta bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestes en Cristo (Efesios 1:3). Sus pecados han sido perdonados, está hecho completo y santificado por medio de la obra redentora de la cruz (Hebreos 10:10). Tiene Vida Eterna en Cristo quien mora dentro de el por medio del Espíritu Santo (I Corintios 6:19). Un verdadero cristiano permanece en Cristo, crece en la Gracia y el conocimiento y persevera hasta el fin. El que no persevera o vive en pecado no ha conocido a Cristo aunque diga y aparente lo contrario (I Juan 2:9,11; I Juan 2:19).
La Predicación: Cada cristiano tiene como mandamiento divino el predicar el evangelio. Esta orden es la gran comisión que incluye a hombres y mujeres nacidos de nuevo. Es nuestra tarea como creyentes regar la semilla del evangelio en el corazón de todos los hombres. El Espíritu Santo se encargara de hacer su obra de dar vida y la convicción produciendo la fe y el arrepentimiento en la persona. Dios es quien llama a los que han de ser salvos y limpia a los que creen de todos sus pecados por medio de la sangre de Cristo.
Últimas cosas: Creemos que Jesucristo volverá en cuerpo en su determinado tiempo y de forma visible para juzgar a vivos y muertos; y que todos los hombres seran resucitados, primeramente los que han creído en Cristo para vida eterna, y luego los que no creyeron, para condenación eterna. (Juan 5:29; Apocalipsis 20:11-15).