(Tiempo estimado: 12 - 24 minutos)

Ratio: 4 / 5

Inicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio desactivado
 

 Por Rev. Ramón Herrera
Pastor y Maestro


Existe un problema en cuanto al concepto de la gracia en el Antiguo Testamento, es algo un poco complicado a causa del hecho de que idea de gracia, como la entendemos, se expresa raramente. Es decir una persona de nuestro tiempo piensa con cierta naturalidad de lo que es la gracia, en términos del N.T., en la total revelación de Cristo. Y esto es lo   que inconscientemente traslada en su pensar a las páginas del A.T.  

El A.T. no emplea una palabra específica para la gracia, sin embargo las distintas palabras que se usan para referirse a la gracia ofrecen un antecedente muy útil para el significado de la gracia en el N.T.  

La primera palabra que hay que considerar es chen con algunos de sus derivados. El verbo chanan parece significar o incluye la idea hacer un favor .Jeremías 31. 2  Así dice el Señor: Ha hallado gracia en el desierto el pueblo que escapó de la espada, Israel, cuando iba en busca de su reposo.  

Hay algunos anticipos del A.T. que se refieren a la conversión de Israel. Zacarías 12. 10 Y derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén, Espíritu de gracia y de súplica y me miran a mí, a quien han traspasado. Y se lamentarán por El, como quien se lamenta por su hijo único, y llorarán por El, como se llora a un primogénito. Está muy claro que estas referencias a chen es algo que no se espera así como que no se merece y que no se consigue por creer, sino es más bien como “favor no merecido”.  

Si la gracia es favor no merecido de parte de Dios para las personas derramadas de manera especial, entonces resulta muy claro que la gracia en el A.T. hay que verla en el conjunto de tratos con la humanidad; viene acompañada de compasión, paciencia, tolerancia, bondad. Éxodo 34. 6,7 Entonces pasó el Señor por delante de él y proclamó: El Señor, el Señor, Dios compasivo y clemente, lento para ira y abundante en misericordia y verdad; el que guarda misericordia a millares, el que perdona la iniquidad, la trasgresión y el pecado...

DESDE EL PRINCIPIO

En el Edén

De cualquier manera que nosotros usemos el término que se usa para designar la condición de Adán antes de la caída, es más que evidente que Adán tenía alguna capacidad de gracia que había sido concedida por Dios. Después de la caída de Adán y Eva cuando se escondieron de la presencia de Dios y conocieron que estaban desnudos, después que Dios les dijo las consecuencias de su pecado, Génesis 3.11-20, Dios le hizo vestiduras de pieles, esto nos sugiere la muerte de un animal  o sea la sangre derramada para “ponerle nuevas vestiduras a Adán y Eva” Eso sugiere el sacrificio de Cristo que nos cambia de “vestiduras” ya que Adán y Eva Cosieron (obras) delantales de hojas.

Después de la caída ciertos rasgos de Adán y Eva que él fueron dados originalmente como dones de gracia, no se perdieron, aunque sí se le estropearon a la pareja en su caída. Usted preguntará ¿Cuales fueron esos dones de Dios que Adán recibió? .Esos dones son los que hacen al hombre como tal, intelecto, sensibilidad, y la voluntad, justicia, santidad, pero eso si una santidad limitada ya que por perfecto que fuera Adán era sólo un criatura. Segundo era una santidad no confirmada porque Adán no había pasado todavía la prueba.

Las consecuencias de la caída no sólo afecto su posición de justo en relación con la presencia de Dios, sino que también estropeo la personalidad. Es evidente que su intelecto fue oscurecido y su voluntad vino a ser esclavizada por el pecado. A causa de esta pérdida, Adán tuvo que depender de la gracia de Dios, afectando la propia naturaleza y necesitó la misericordia de Dios para que tierra produjese lo necesario para mantener a Adán, Eva y a su familia. (Génesis 3. 17-19).

El Trato con los Patriarcas

El pecado de Adán y Eva afectó también a su descendencia, ya que los efectos de la caída se imputaron a toda la raza humana, de tal manera que la conducta de las personas fue una de continuo al mal. Pero a pesar de ello hubo algunos que encontraron gracia a los ojos de Dios, como Abel, que trajo a Dios la clase de ofrenda que El había mandado, resultando justo delante de Él. Génesis 4.4... Y el Señor miró con agrado a Abel y a su ofrenda. Hebreos 11. 4  Por la fe ofreció a Dios un mejor sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó el testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y por la fe, estando muerto, todavía habla.

La palabra gracia [chen] se emplea por primera vez en la Biblia en relación con Noé Génesis 6. 8  Más Noé halló gracia ante los ojos de Dios. El resultado de ello, se salvó del diluvio y además fue heredero de justicia (Hebreos 11. 7). También Abraham  halló gracia [chen] ante los ojos de Dios Génesis 18. 3...y dijo: Señor mío, si ahora he hallado gracia ante tus ojos, te ruego que no pases de largo junto a tu siervo. Y está revelación de la gracia de Dios está conectada con la promesa de la semilla a través de Sara. La gracia [chesed] le fue también dada a Abraham por Dios cuando le mostró una esposa para su Isaac (Génesis 24. 27)

También la gracia [chesed] fue dada a Lot  concediéndole que escapara a Zoar cuando Sodoma fue destruida (Génesis 19. 19). También Jacob probó la gracia [chesed] en su encuentro con su hermano Esaú (Génesis 32. 10). Y dijo Jacob: No, yo te ruego; si he halado ahora gracia en tus ojos, acepta mi presente, porque he visto tu rostro, como si hubiera visto el rostro de Dios, pues con tanto favor me has recibido. También Dios mostró su gracia [chen] al conceder favor a José ante el guardia de la cárcel  Génesis 39. 21 Pero Jehová estaba con José y le extendió su misericordia, y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel...

Israel también fue sacado de Egipto por  la gracia [chesed]  Éxodo 15. 13 En este texto la palabra clave es redención, la redención siempre estará ligada con la gracia, recordemos la sangre rociada en los dinteles de las puertas que protegía a todos los primogénitos.

El gran caudillo del pueblo de Israel que los sacó de la esclavitud de Egipto, halló gracia [chen] ante Dios. Éxodo 33. 12-13; 16,17  Y dijo Moisés a Jehová: Mira, tú me dices a mí: Saca este pueblo; y tú no me has declarado a quién enviaras conmigo. Sin embrago, tú dices: Yo te he conocido por tu nombre, y has hallado también gracia [chen] en mis ojos. Ahora pues, se he hallado gracia [chen], te ruego que me muestres ahora tu camino, para que conozca, y halle gracia [chesed] en tus ojos; mira que esta gente es pueblo tuyo ¿Y en qué se conocerá aquí que he hallado gracia [chesed], en tus ojos, yo y tu pueblo, sino en que tu andes con nosotros,  y que yo y tu pueblo seamos apartados de todos los pueblos que están sobre la faz de la tierra? Y Jehová dijo a Moisés: También haré esto que has dicho, por cuanto has hallado gracia [chesed]  en mis ojos, y te he conocido por tu nombre.

Durante el período de los patriarcas, las personas también hallaron gracia ante los ojos de de otras personas, como nos muestra algunos ejemplos. La palabra hebrea usada es [chen]  dando la idea de favor no merecido.

La Gracia Durante la Ley

La razón de que la gracia sea considerada como opuesta a la ley dada por Moisés; tiene dos aspectos importante,  uno, que es “un ministerio de  muerte” (2 Corintios 3. 7). Y dos que la ley fue dada por Moisés y la gracia vino por Jesucristo (Juan 1. 17). Si la gracia es “favor no merecido” el antónimo de la ley es el mérito como recompensa.

En dos (1) aspectos la ley es opuesta a la gracia, en que durante ese periodo las personas estaban impedidas de recibir la revelación de la gracia en Cristo. (2)  La ley tenía su operación básica en un principio de méritos (Deuteronomio 28.1-14). De otro lado, la gracia, en el sentido general de favor inmerecido fue también obtenida bajo la ley, aun si el principio que operaba bajo la ley era uno de mérito. Se nos hace un extremismo innecesario no reconocer la gracia durante el período de la ley.

Hay gracia en la elección

No tenemos duda que la gracia es una combinación de la soberanía de Dios y el favor ejercitado en favor de la criatura. Realmente la gracia no es un derecho de la criatura. Es un favor que no se merece. De tal forma que debe administrarse como Dios quiera

..

Lo que pudiéramos llamar gracia electiva bajo la ley se hace muy evidente de varias maneras. (1)  Al pueblo elegido, Dios le promete en su gracia [chesed] Paz Levítico 26. 6  Y yo te daré paz en la tierra... (3)  Deuteronomio 7. 16  Y destruirás a todos los pueblos que te da Jehová... (4) Tierras fértiles. Deuteronomio 7. 13  Y te amará, te bendecirá y te multiplicará, y beneficiará el fruto de tu vientre y el fruto de tu tierra, tu grano, tu mosto, tu aceite, la cría de tus vacas, los rebaños de tus ovejas, en la tierra que juró padres que te daría.(5) Bendiciones extraordinarias. Deuteronomio 7.14 Bendito serás más que todos los pueblos; no habrá en ti varón ni hembra estéril, ni en tus ganados. (6) longevidad. Deuteronomio 5. 33 Andad en todo el camino que Jehová vuestro Dios os ha mandado, para que viváis y os valla bien, y tengas largos días en la tierra que habéis de poseer. (7) Salud física Deuteronomio (7). 15 Y quitará Jehová de ti toda enfermedad; y todas las malas plagas de Egipto, que tú conoces, no las pondrá sobre ti, antes las pondrá sobre todos los que te aborrecen. (Jehová, como Dios personal.  Levítico 26. 12 Y pondré mi morada en medio de vosotros, y mi alma no los abominará.

Tanto las personas elegidas, como Israel como nación, recibieron la gracia de Dios en vista de que la gracia “es favor no merecido”.

RESTAURACION

No es un secreto que la ley de Moisés no fue enteramente un sistema de mérito porque fue dada como un acto de gracia de la elección. El patriarca Moisés    ha sido la única persona, aparte de Jesucristo, llamada “mediador” en

Las Sagradas Escrituras, y lleva a cabo su papel de mediador en la primera transgresión de la ley, Moisés se ofrece a sí mismo como sacrificio por los pecados del pueblo. Éxodo 32. 30-32. Y aconteció que al día siguiente dijo Moisés al pueblo: Vosotros habéis cometido un gran pecado, pero yo subiré ahora a Jehová; quizá le aplacaré acerca de vuestro pecado. Entonces volvió Moisés a Jehová, y dijo: Te ruego, pues este pueblo ha cometido un gran pecado, porque se hicieron dioses de oro, que perdones ahora su pecado, y si no, ráeme ahora de tu libro que has escrito. La Biblia registra a continuación el castigo del pueblo, y de esta promesa a Moisés que tiene tres partes: 1) La presencia de Dios.  Éxodo 33. 14 Y le dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso. 2) Nuevas tablas de la ley Éxodo 34. 4. Y Moisés alisó dos tablas de piedra como las primeras; y se levanto de mañana y subió al monte Sinaí, como le mando Jehová, y llevó en su mano las dos tablas de piedra. 3) Mayores revelaciones de la naturaleza de Dios Éxodo 34. 5; 9 Y Jehová descendió de la nube, y estuvo allí con él proclamando el nombre de Jehová. 9 Y dijo: Si ahora, Señor, ha hallado gracia en tus ojos, vaya ahora el Señor en de medio nosotros;...No nos queda otra cosa que e decir que la ley iba mezclada con la gracia.

Un nuevo ejemplo de la gracia es la conquista de Canaán, más Israel fracasó al no destruir a los habitantes de la tierra. Los 14 jueces fueron un complemento de la gracia. Jueces 1.1, 2 Aconteció después de la muerte de Josué, que los hijos de Israel consultaron a Jehová, diciendo: ¿Quién de nosotros subirá primero a pelear contra los cananeos? Y Jehová respondió: Judá subirá; he aquí que yo he entregado la tierra en sus manos. La posición de rey erigido como un baluarte en defensa de la justicia de la ley (1  Crónicas 22.12-13) Saúl que fue el primer rey, fue un fracaso total.

La vida de David fue errática en muchas ocasiones a causa del pecado, así mismo la fidelidad de Salomón seguida por una idolatría rampante que el llevo a una vida impía.

Como consecuencia vino la división del reino, e Israel vivió durante 250 años sufriendo de reyes malvados, así mismo los 390 años de Judá con 27 reyes no le fue mejor. Pero a pesar del pecado de Israel, la gracia de Dios nunca fue anulada. Oseas 2.19, 20. Y te desposaré conmigo para siempre; te desposaré conmigo en justicia, juicio, benignidad, y misericordia. Y te desposaré conmigo en fidelidad, y conocerás a Jehová. (Amos cap. 4).

La Llamada Tensión

La tensión entre la ley y la gracia, fue provocada por la apostasía del pueblo de Israel, y también por Judá. Esta tensión fue rota con el anuncio de un nuevo pacto. (Jeremías 31.31-34). De esta manera vemos que la gracia hace su entrada en escena, en medio de la ley rota. Este nuevo pacto categóricamente contrastado por Dios con “el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto” Las bendiciones contenidas  en este nuevo pacto a causa de la antigua relación entre Dios y su pueblo, no es que se han restaurado sino que se afirma incluyendo una nueva mente, y un nuevo corazón (v. 33  Isaías 59.21). Continuando con la restauración  (Isaías 61. 9), el perdón de pecados (Jeremías 31. 34 b). Ministerio del Espíritu Santo (Jeremías 31. 33; Ezequiel 36.27). Bendiciones materiales (Jeremías 32 .41-44). La construcción del santuario (Ezequiel 37. 26-28) y sobre todo la paz (Oseas 2. 18). Tenemos que añadir que todas estas bendiciones del nuevo pacto son ratificadas por la sangre (Zacarías 9 11. Y tú también por la sangre de tu pacto serás salva; yo he sacado tus presos de la cisterna en que no hay agua. .

Es evidente de que el nuevo pacto, espera la futura venida del Libertador. Ya que la promesa del pacto fue  dado bajo la ley mosaica. Por esta razón y por toda la de la gracia que contiene el nuevo pacto aparece como otro despliegue de la gracia de Dios bajo la ley de Moisés. (Romanos 11. 26,27). Y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador. Que apartará de Jacob la impiedad. Y este será mi pacto con ellos, cuando quite sus pecados.

Los Santos del Antiguo Testamento

Algunos santos del A.T. no pudieron conformarse a los requerimientos de la ley. Gracias a esto fue posible que la gracia de Dios le suministrara capacitación divina. Es sabido que bajo la ley no había garantía universal ni tampoco permanente de la presencia del Espíritu Santo como en nuestros días.

No podemos decir que bajo la ley no existía capacidad alguna, se le hace claro a Israel que no podía pensar de que su posición de privilegio era el resultado de sus acciones meritorias. Deuteronomio 8. 18. Sino acuérdate de Jehová tú Dios, porque El te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día. Ya que confiar en la carne no tenía ninguna esperanza (Isaías 40. 29-31.

Es muy impresionante que el A. T. esté lleno de referencias a la fuente de la gracia y que la recomienda como a Dios mismo. Por ejemplo David lo reconoció. 1 Crónicas 29. 11. Las riquezas y la gloria proceden de ti, y tú dominas sobre todo; en tu mano está la fuerza y el poder, y en tu mano el hacer grande y dar el poder a todos. También amonestaba al pueblo en la búsqueda de Dios  1 Crónicas 16. 11. Buscad a Jehová y su poder; buscad su rostro continuamente. Otras citas confirman esta realidad Como: (Salmo 29. 11; Jeremías 16.19; Isaías 17. 10). Es más, en algunos casos se encuentra unida a la salvación. Salmo 140. 7 Jehová Señor, potente salvador mío, Tu pusiste a cubierto mi cabeza en el día de la batalla. (Salmo 118. 14; Isaías 12. 2).

La oferta  que la gracia ofrecía era muy extensa. Miqueas 3. 8. Mas yo estoy lleno del poder del Espíritu de Jehová, y de juicio y de fuerza, para denunciar a Jacob su rebelión, y a Israel su pecado. (Salmo 21, 28). Esta capacitación es atribuida al Espíritu Santo. Jueces 13. 24-25... y el Espíritu de Jehová comenzó a manifestarse en Sansón y en los campamentos de Dan, entre Zora y Estaol. Éxodo 31.3 Y lo he llenado del Espíritu de Dios, en sabiduría, y en inteligencia, en ciencia y en todo arte. (Jueces 3. 10; 1 Samuel 10 9-10) Jueces 14. 6).

Hay que notar algo muy importante, y es  que la presencia de la gracia no ablanda o reduce los requerimientos firmes de la ley, así como en el día de hoy, el don del Espíritu Santo no reduce los requerimientos de la gracia. Lo que no se puede negar es que bajo la ley hubiese la provisión de capacitar a las personas.

La Gracia en el Pacto Davídico

Este pacto se convierte en uno de los despliegues más gloriosos de la gracia de Dios en el A.T. Y hay varias razones para ello. Uno, que la palabra usada [chesed] nos indica la constante naturaleza del pacto; nos muestra además la misericordia de Dios con David. Dos, en el cumplimiento del pacto, así como en toda profecía cumplida está la fidelidad de Dios. Tres, si la fidelidad de Dios no cambia (Salmo 89. 33) si el pacto de Dios no se altera (Salmo 89.34), Si Cristo no está sentado en el trono de David y regresara a la tierra, entonces  la manifestación del [chesed] de Dios tendrá que verse en el futuro. Lucas 1. 32,33 Este será grande, será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin

Terminamos esta parte con uno de los ejemplos más elocuentes de la gracia, es el caso del rey David hacia Mefii-boset, que encontramos en 2 Samuel capítulo 9. De este capítulo tomamos el versículo 13 << Y moraba Mefi-boset en Jerusalén, porque comía siempre a la mesa del rey; y estaba lisiado>>.

La Gracia y la Fe

Cuando decimos que la Salvación en el A.T. es una doctrina muy complicada, pero realmente esto no es evidente. No importan cuales sean las diferencias que existan entre los varios puntos de vista; hay algo en que todos estamos de acuerdo; en que el asunto requiere de la gracia.

La condición de la fe en la salvación en todas las edades es algo en que están de acuerdo casi todos los teólogos. De esto deducimos que la fe como condición para la salvación fue la misión del A.T. Así como también en el día de hoy.

En el caso de Abram, creyó al Señor y se le contó por justicia (salvación). Génesis 15. 6  Y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia.

El pacto mosaico requería el ejercicio de la fe. La ley señalando a la gracia electiva de Dios; además de la justa retribución de Dios, como el fundamento de la justicia de la ley que presupone sumisión al pacto de Dios como se manifestó en la fe de Abraham en la promesa de Dios. (Salmo 26.1; 78.7).

El objeto de la fe en Dios, se ve de una manera clara en el uso que el A.T. le da a la palabra amen, creer, Esta raíz significa fortificar, apoyar, mantener. Números 14.11.  Y Jehová dijo a Moisés: ¿Hasta cuándo me ha de irritar este pueblo? ¿Hasta cuándo no me creerán, con todas las señales que he hecho en  medio de ellos? (Números 20. 12; Deuteronomio 1. 32; 2 Reyes 17.14). En cada uno de estos casos, el nombre de Yahvéh del pacto se emplea para indicar el objeto de la fe.

Aunque Yahvéh  es el principal objeto de la fe en el A.T. hay otros objetos adecuados de la fe que son secundarios  pero que son  representativos. 2 Crónicas 20.20 <<  Y cuando se levantaron por la mañana, salieron al desierto de Tecoa. Y mientras ellos salían, Josafat, estando de pie, dijo: Oídme, Judá y moradores de Jerusalén. Creed en Jehová vuestro Dios y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados >>

Dios es el único objeto de la fe pero era también el Salvador, esto queda muy claro en el A. T. Como Salvador que libra de los enemigos. (Salmo 27). Obró maravillas (Isaías 43. 11). Compasivo (Isaías (63 8, 9). Poderoso (Isaías 49.26). En otros pasajes la salvación se le atribuye a  Dios. (Salmo 9.14; 21.1; 20.5; 69.13; 106. 4) Se le llama roca de la salvación (Deuteronomio 32.15; 2 Samuel 22.47; Salmo 89.26;) La salvación pertenece a Jehová (Salmo 3. 8; Jonás 2. 9).

Ahora surge una cuestión, si aquella revelación del A. T. incluía a Cristo como objeto consciente de la fe. Estos textos lo prueban  Salmo 16. 8-11 << A Jehová he puesto siempre delante de mí; Porque está a mi diestra, no seré conmovido. Se alegró mi corazón, y se gozo mi alma; mi carne también reposará confiadamente; porque no dejarás mi alma en el Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción. Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; Delicias a tu diestra para siempre>>.El segundo texto es Juan 8.56  << Abraham vuestro padre se gozo de que había de ver mi día; y lo vio y se gozó. >>. Este versículo tiende a significar que durante la vida de Abraham tuvo cierta clase de visión anticipada de Cristo, ya sea con ocasión de la ofrenda de Isaac o pudiera ser durante el nacimiento milagroso de Isaac o también cuando los tres visitantes angelicales se presentaron a él. O cuando se enfrentó a Melquisedec. El tercer texto es Job 19. 25-26 << Yo sé que mi redentor vive, y al fin se levantará sobre el polvo, y después de deshecha esta mi piel, En mi carne he de ver a Dios>> Si. Esto se utiliza como prueba de que había una fe consciente en Cristo. Y la palabra Redentor se usa  de una manera profética. Ya que algunos santos del A.T. tuvieron revelaciones proféticas muy especiales concerniente a Dios, la fe de los santos de ese período no incluía el sacrificio de Cristo en la cruz. Además el capítulo 11 de la carta de Pablo a los Hebreos dan un testimonio poderoso de la vida entre los santos del A.T. Veamos el versículo 2 de Hebreos 11 <<  Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos>>. Otra versión de la Biblia de las Américas dice [ Porque por ella recibieron aprobación los antiguos}. Teniendo en mente esto: Les invito a leer y más que leer a estudiar el resto del capítulo de Hebreos 11.

Los sacrificios

Tenemos que internarnos entre los sacrificios del A. T. Para examinar el contenido de este sistema y su relación, con la salvación tal y como no llega ahora en estos días. Hay varias opiniones en cuanto a  la eficacia de los sacrificios del A.T.

En general, hay varias opiniones relacionadas con los sacrificios levíticos. En primer lugar, si su eficacia plena tenía que ver con la remisión plena de los pecados, pero que a la vez dependía del que hacia la ofrenda y que prefiguraba el sacrificio de Cristo. En segundo lugar esta opinión mantiene que la eficacia de aquellos sacrificios eran extendidas solamente a la remisión de las penas temporales muy propias del sistema teocrático. En tercer lugar esta opinión combina las dos ideas, afirmando que los sacrificios mismos eran eficaces dentro de la comunidad de Israel, pero al mismo tiempo cuando se ofrecían con fe también eran eficaces para la salvación por la fe.( Levítico 1. 4; 16. 20-22; 4. 26-31 ). Por otro lado, el N.T. dice: << la sangre de los toros y de los machos cabríos no pueden quitar los pecados>> (Hebreos 10.4) << la ley, teniendo la sombra de los bienes venideros, no la misma imagen de las cosas, nunca puede, por los mismos sacrificios que se ofrecen continuamente cada año, hacer perfectos a los que se acercan> (He. 10. 1).

Esta es una aparente dificultad. La misma recibe cuando distinguimos la relación primaria del pecado en el A.T. y de la del N.T. En la ley, el Israelita individual tenía una relación con Dios por pacto teocrático; pues había nacido dentro de esa sociedad y mantenía una relación con la teocracia que no tenía que tener en cuenta su estado espiritual.

Pero, como era una teocracia, gobernada por Dios, cualquier pecado era una ofensa gubernamental, al mismo tiempo que espiritual. El resultado era que para tal persona el pecado había que considerarlo como afectando a su posición y a los privilegios como miembro del pueblo de Israel.

Resumiendo este complicado sistema de sacrificios tenía, en efecto, una eficacia particular cuando restauraba al ofensor automáticamente a sus privilegios gubernamentales y teocráticos, pero sin embargo no podía operar con el pecado de una manera final. Sin embargo, los sacrificios levíticos significaban símbolos de un trato final con el pecado y sobre todo tenían la misión de atraer la fe de parte de la persona precisamente en ese trato final. Pero,  el objeto de tal fe era Dios y no específicamente Cristo, Pero sin embargo la persona que ejerciera semejante fe era redimida, incluso si el contenido de su fe era diferente de la de los santos en el día de hoy. Tal individuo redimido, sería  obediente y fiel al ofrecer los sacrificios porque entonces, como ahora, la fe salvífica produciría obras aceptables.

Este estudio finaliza, aunque tenemos que decir que no hemos agotado nuestro tema en su totalidad, así como tampoco podemos decir que es imposible que pueda ser agotado por nadie. A lo largo de toda la eternidad adoraremos y seremos fieles a Aquel que fue el cuerpo de la gracia, y también tenemos que decir que nosotros todos seremos el despliegue de su gloriosa gracia. <<... para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús. Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras para que nadie se gloríe. >>. (Efesios 2. 7-9).

Textos Bíblicos, Reina Varela 1960

Terminado Agosto 21,2003.

 


Sola Gratia, Sola Fide, Solus Christus, Sola Scriptura, Soli Deo Gloria

Ministerio
"En Línea con la Palabra"

Rev. Ramón Herrera
Pastor-Maestro
Miami, Florida USA E-Mail:Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.';document.getElementById('cloaka1ce79f84546a391671883ba1a0c9235').innerHTML += ''+addy_texta1ce79f84546a391671883ba1a0c9235+'<\/a>';